Las madres suelen hablar de lo cerca que se sienten con sus parejas antes de que nazca su primer hijo. Les escandalizan los titulares sensacionalistas que utilizan los periodistas, como “Tener un bebé puede arruinar tu matrimonio”. Están convencidas de que su amor, que ha engendrado a sus bebés, aumentará cuando nazcan.
Cuando nace el bebé, las parejas descubren rápidamente su bajo nivel de preparación. (…).
De lo que pocos padres hablan es del cambio trascendental que se produce cuando una relación de dos personas se abre para incluir a una tercera.
Una relación de dos personas es muy diferente de una de tres. La de tres es más compleja, más hijos aumenta la complejidad, pero el cambio no es tan grande como el de dos a tres.
Los nuevos padres no sulen considerar estre cambio. Normalmente centran su atención en cuestiones prácticas, así que pueden seguir pensando como si fuesen dos personas durante meses. Un nuevo padre puede intentar mantener la antigua relación de pareja, mientars que una nueva madre puede formar una relación cerrada con su bebé que excluya a su pareja. Esta situación puede hacer que uno de los dos se sienta menospreciado por el otro con facilidad.
Un nuevo padre puede sentirse poco querido. Despues de estar trabajando durante el día vuelve a casa por la noche cansado, y sin duda alguna asocia su casa con un lugar cómodo. Mientras tanto, su pareja ha dedicado muchas horas de amor, paciencia y autocontrol a su bebé, sin ningún adulto que pueda ratificar lo bien que lo ha hecho. Puede estar impaciente consigo misma por “no haber hecho nada” en todo el día. Se alegra de ver a su pareja, pero al mismo iempo puede verlo como una crítica para ella. Vuelve del “mundo del trabajo” que antes compartían. Ha tenido un día entero para hacer “algo”. A muchas mujeres les asombra lo furiosas que se pueden sentir con sus parejas. La pareja indaga en su conciencia, pero no se puede imaginar qué ha hecho para recibir ese reconocimiento.
(…) Puede ser especialmente dificil si una pareja cree que su cansancio y su irritabilidad son definitivos en vez de una etapa de adaptación. Las madres se pueden sentir más tranquilas al intercambiar impresiones. Pueden reirse de sí mismas y recuperar su perspectiva.

Es liberador saber que la mayoría estamos ahí, que se pasa, que se recupera la vida de pareja, que no nos hemos vuelto locos ni nos hemos convertido en marcianos, sino que estamos atravesando una etapa hermosa pero exigente y a veces dificil a nivel personal.
Me ayuda hablar del tema con otras parejas y reirnos aliviados de las mismas anécdotas e historias o muy similares... y tratar de buscar raices, aprender de lo que emerje, encontrar razones para poder seguir caminando en el sendero de la vida cogidos de la mano.
Un abrazo
Isa
1 comentario:
Te lo he dejado mal, el mensaje.
Te lo dejo aquí.
Te envio un meme de la felicidad;
http://www.luperca.net/2008/07/meme-sobre-la-felicidad.html
Un besico.
Marián
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