Recibe aviso para las reuniones

¿Qué es el Puerperio?

Según la RAE el puerperio se define como el Periodo que trascurre desde el parto hasta que la mujer vuelve al estado ordinario anterior a la gestación. La definición médica nos cuenta que es el periodo que comprende desde el final del parto hasta la normalización de los cambios fisiológicos producidos durante el embarazo.

¿¿Alguna vez volveremos al estado “ordinario” anterior a tener a nuestro hijo?? ¿Realmente los cambios producidos sólo son fisiológicos o algo cambia en nuestro ser, en nuestra alma, cuando somos madres? ¿El puerperio termina realmente a los famosos 40 días?

Te propongo olvidarnos del tiempo físico, acercarnos al tiempo emocional donde nos encontramos mamá-bebé, rechazar la invitación a volver a ningún estado ordinario y adentrarnos en este periodo fusión madre-hijo, cuya duración hay que descubrir y valorar de nuevo, compartir nuestros miedos, nuestras aventuras y descubrimientos.

FELIZ INMERSIÓN!

martes, 10 de noviembre de 2009

La sombra

¿¿Pero qué es esto de la sombra?? qué tiene que ver con el puerperio, con la crianza, con mi bebé??

La sombra es un término, acuñado por Carl G. Jung, para referirse al aspecto "en negativo" de la personalidad, la suma de aquellas cualidades desagradables que desearíamos ocultar, el contenido del insconsciente personal, es aquello que una persona NO DESEA SER.

La sombra son aquellos aspectos que hemos ido rechazando de nosotros mismos, las áreas que no encajaban con lo que queremos ser u otros quieren que seamos, todos estos aspectos los vamos echando a un "saco imaginario" que llevamos arrastrando. En el saco podemos llevar la sexualidad rechazada durante nuestra infancia, o la femeneidad/masculinidad, también puede estar en el saco la creatividad, la debilidad... o la fortaleza. Nuestros aspectos rechazados no tienen porqué ser considerados como "malos, o negativos" puede suponer su integración en nuestra personalidad una gran fuente de crecimiento y fuerza, pero en algún momento de nuestra vida han sido considerados NO APTOS (para la conciencia, así que se van al saco) y les llevamos, sin ser muy conscientes de ellos, hasta que nos empiezan a incomodar (a veces se "escapan" del saco, como invitados no deseados...) o empezamos a revisar lo que nos resta tanta energía (un enorme saco!!)

Al abrir el saco y mirar qué puede haber ahí dentro, no es extraño que algunos aspectos estén bastante deformados y oscuros -tanto tiempo encerrados...- algunas veces se nos escapan y otras los vemos reflejados en otras personas, en situaciones de la vida... Ese es el trabajo con la sombra, el empezar a ver qué tenemos en nuestro saco, qué hemos rechazado de nosotros, pero que está ahí, pegadito a nosotros, sin ser consciente. Dar luz a lo oscuro, bucear en lo oculto, descubrir los posibles tesoros, aprender a vivir en el misterio

Aquellas cosas que me irritan sobremanera de los demás - son aspectos sombríos reflejados en los otros- aquellos sentimientos secretos de verguenza- apuntan hacia la sombra- los sueños también nos revelan aspectos sombríos. Estos son algunos hilos de trabajo para empezar a descubrir lo que nos cuesta ver. Si queremos embarcarnos en este camino podemos también pedir feed back a los demás (escuchar cómo nos ven los demás), podemos curiosear en nuestras proyecciones, positivas y negativas, lo que apreciamos y/o odiamos del otro, podemos examinar nuestros lapsus o investigar nuestro sentido del humor...

Y en el puerperio qué ocurre?? Pues además de estar especialmente sensibles, estamos en contacto con un ser íntegro, que no ha enviado lo que no le gusta al inconsciente. El bebé es como es, si le duele llora si tiene hambre tiene hambre, si rie rie... Vive el presente, no conoce nuestra cultura ni nuestras normas (lo que está bien, lo que está mal), está en pleno contacto con sus sentimientos. El bebé es luz y sombra (o mejor, no tiene sombra ya que no rechaza todavía nada de sí) y por eso refleja nuestra sombra de forma poderosa...

Si no vemos, por ejemplo, nuestra parte dependiente (sombra) esa faceta del bebé nos resultará quizás abrumadora, quizás sea el llanto del bebé lo que nos resulte dificil de sobrellevar, o más adelante su rebeldía, o su enfado...

Además sucede que en el puerperio la conexión mamá-bebé sigue presente, de forma sutil, es por ello que nos sentimos especialmente sensibles, como bebés, frente algunos estímulos, que nos conmueve nuestro bebé, su llanto, su presencia, y a su vez el bebé puede reflejar, en su cuerpo, lo que no sepamos traducir, lo que se mueve en nuestro saco que no vemos, o no queremos ver, y puede que se manifieste a través de nuestro hijo...

Por ello vale la pena escuchar a los bebés, a los niños, y hacernos las preguntas necesarias, para poder enfrentar nuestra verdad, quienes sómos, qué sentimos... y poder asumir nuestra historia, hacerla consciente y delimitar nuestras necesidades/sentimientos de las de nuestro bebé. Como dice mi terapeuta, poner cada necesidad en un estante, lo de la madre de la madre y lo del hijo con el hijo, así evitamos confusiones en el bebé.

El trabajo con la sombra es tarea de una vida, siempre hay algún personaje que descubrimos, alguna faceta que no vemos, algún aspecto rechazado que nos despierta "el otro". El poder verlo es un primer paso, el no echar la culpa al "otro" sino pararse y con curiosidad y valentía explorar qué evoca la situación, qué tiene que ver con lo que rechazo, lo que no quiero ver de mi...

La sombra nos abre caminos, nos permite ensanchar las carreteras de nuestra personalidad conocida, ampliar nuestro repertorio -jugar otros personajes, otras facetas- y una vez integrada, conocida, aceptada, nos enriquece y nos completa y de esta forma podemos salir de la compulsividad, del desbordamiento y secuestro de los personajes sombríos tanto tiempo encerrados... y avanzar en la tarea larga de vida de conocerse a si mismo.

Isa

P.D. El dibujo lo realicé durante estas vacaciones, en casa Mari Cruz, es una adaptación de un dibujo que me impactó, que encontré en un libro de brujas... Me gustó el trabajo de claroscuro y lo que se deja intuir acerca de que la sombra no es más que una ausencia de luz, su visión puede atemorizar, pero es una parte nuestra, quizás más asalvajada, pero en estos tiempos que corren, una buena oportunidad para bucear en lo intuitivo, en lo políticamente no correcto y en lo sutil...

3 comentarios:

borboleta dijo...

Que acertado todo lo que has escrito, te explicas de maravilla!!
El dibujo es impactante, una curiosidad el libro de Brujas era de Toti Martinez de Lezea?
Un saludo.

Isa dijo...

Hola Borboleta!!
Gracias por tu comentario!! la verdad no me acuerdo del libro en concreto, pero puede ser, porque hablaba de la brujería en el país vasco tb...
Tenía dibujos bien chulos, pero este era genial!! el trabajo con los claroscuros estaba mucho mejor en el original, pero fué un placer copiarlo con licencias
Un enorme abrazo
Isa

Anónimo dijo...

Uff.. qué decirte.. me ha encantado la entrada Isa, no estoy pasando unos buenos momentos personales y es que "mi sombra" está acechandome por momentos... y bueno el dibujo eres IM-PRESIONANTE!! menudas manitas tienes!!
Muchos besos y espero verte pronto!!... nos haces mucha falta en el grupo tus palabras, tus consejos, al menos para mi me sirven de gran ayuda!! ^_^ una vez más, besos familia!!